4 de abril del 2020
Temprano en la mañana me encuentro con un montículo de tierra cerca de la carretera hacia Calbuco.
Puerto Montt amanece con un día despejado ideal para caminar, pero como estamos en pandemia todo es restringido, complicado y a veces absurdo como las grandes filas que se armaron en el centro toda esta semana, por el estúpido afán del sistema de burocratizarlo todo.
La ciudad goza de buenas temperaturas aún. Si en la noche hubo bastante frio.
A continuar no más.