miércoles, noviembre 08, 2017

7 países abiertos en un soplo del caminante en búsqueda parte XI

23 de septiembre del 2017 
La tierra del cielo del consumo de fe















Muy temprano llegamos a la puerta de entrada de los museos Vaticanos, mucha gente entre devotos católicos, admiradores del arte, la historia o simples curiosos esperan con calma, bajo estrictas medidas de seguridad. Como una media hora la fila avanzo, fue rápido el trámite, la verdad acá saben de negocio, mucha tiendas se aprecian en el interior. En el patio de la piña ( llamado así por una piña de bronce) anduve dando vuelta por una la esfera de A. Pomodoro colocada aquí en 1990 para respirar aire y dejar a la guía que explicada una interminable descripción de la simbología de la Capilla Sixtina. Pasamos después adentro de los museos vaticanos por la multitud uno podía apreciar poco las obras escultóricas etruscas, romanas y una bellísima galería de mapas pintados referente a Italia con base a dibujos del fraile y geógrafo Ignazio Danti. Entre 1580-1583. Después entramos a la Capilla Sixtina la cual no permiten tomar fotos, allí tomamos un alto de por lo menos unos 15 minutos para después abrirse paso en la multitud. Cruzamos después hacia la Basilica de San Pedro, lo primero que aprecie fue la Piedad de Miguel Angel , la cual esta protegido por un vidrio especial. El lugar, dejando de lado las apreciaciones artísticas refleja el poder y ostentación de la iglesia católica, la cual marca su poder terrenal en la mente de sus fieles. Al salir están los negocios para los creyentes, librerías con todo lo referente a la teología, tiendas con crucifijos y diversos objetos religiosos. Ya es mediodía. Pronto abra que tomar otro rumbo en el peregrinaje del descubrimiento.

martes, noviembre 07, 2017

7 países abiertos en un soplo del caminante en búsqueda parte X

22 de septiembre del 2017 
La noche Romana









 Llegamos tarde a Roma capital de Italia. El hotel estaba bien retirado de la zona céntrica, había que darse la idea que se gastaría en movilización. Después de una buena ducha, comer algo tomamos en la noche el bus para una visita nocturna algunos atractivos de esta ciudad. Lo que me llamo primero la atención fue el tiempo, encontrarse con construcciones de la época romana hasta la época contemporánea, cruzarse a la vista con su carga de peso histórico. Al bajar con la guía de nuestro grupo, avanzamos por la calle disfrutando con la tenue luz. Se vivía un ambiente intenso, entre los turistas que pasaban disfrutando la gastronomía, el paisaje y los jóvenes que ya estaban siguendo la ruta de fiesta y placeres hasta la madrugada. En la Fontana di Trevi tire la moneda para cumplir el rito habitual, quizás con esa poderosa ilusión de ir más alla, como buscando ese impulso de trasender en la individulaidad, en aquel tiempo, que pasa siempre, pero estaba el sentimiento y simplemente se debía disfrutar. Continuamos avanzando, cruzándonos con inmigrantes del medio oriente y africa, que vendían diversos objetos, juguetitos, era bajar a la realidad de nuevo y allí estaba el sueño brotando entre los templos romanos, la bellezas que pasaban siguiendo sus tentaciones, las motos vespas donde viajan los amantes con sus relatos de encanto. Tomo un alto como algo para tomar el último impulso en la ruta donde la luz se va disolviendo en el río Tiber.

lunes, noviembre 06, 2017

7 países abiertos en un soplo del caminante en búsqueda parte IX

21 y 22 de septiembre del 2017
 El paraíso se hizo luz en Florencia 
Después de un largo viaje llegamos en la tarde al hotel en Florencia. No hubo mucho que hacer salvo comprar algo que comer, ubicarse en la habitaciones y programarse para la intensa jornada que se venía. Muy temprano iniciamos el recorrido por el casco histórico de la ciudad disfrutando las obras arquitectónicas que han marcado hitos en este lugar. Sin embargo por el Ponte Vecchio que es un puente medieval sobre el río Arno y el cual sobrevivió a la devastación en la Segunda guerra Mundial me encontré con unos versos de Dante Alighieri, (Florencia, c. 29 de mayo de 1265-Rávena, 14 de septiembre de 1321), ese gran un poeta italiano, famoso por escribir la Divina comedia.















Al ir avanzando fui encontrando por las esquinas con más versos del magnífico escritor. Era como viajar por ese libro pasando por el infierno de los turistas que aglomeraban cada punto de interés, tomándose fotos en poses exóticas, superando por una arterias más despejadas que actuaban como un purgatorio donde la ansiedad se hacía luz, al enfrentarse a la gloria pasada del baptisterio y la escultura el rapto de las sabinas de Giambola de 1583, un disfrute, un paraíso instantáneo, de placer en la perspectiva y en la posibilidades del material. Pasando por la iglesia de San Martino y la Piazza dei Donati está la casa que perteneciera a la familia Alighieri durante el siglo XIII. El Ayuntamiento de Florencia restauro el edificio y lo dedico a la memoria del escritor italiano ya que en este sitio nacio.





Actualmente es sede de la Casa_museo de Dante desde 1994. Pasando por una estrecha escalera, uno se encuentra con tres plantas del edificio donde se reconstruye su vida, la Florencia del siglo XIII, su entramado familiar y como está estructurado su libro la Divina Comedia, en la cual uno entiende que es un resumen del pensamiento de una época, sino también de una persona que busca dar significado a su paso existencial.

La luz está en mis manos.
 A partir de nuevo. El viaje sigue.