lunes, abril 23, 2007

El terremoto de Aysén y los sismos en la zona austral de Chile



El 14 de julio de 1896 se produjo un derrumbamiento repentino de un ventisquero del volcán Yate que produjo un desbordamiento del Río Blanco que empujo esa masa de agua y tierra hasta la desembocadura del Estuario del Reloncavi pasando todo el Llano de Yate, ahogando a ocho personas y muchos animales.
Esta visión del pasado se apareció en mi mente después de ver las imágenes del tsunami de Aysén. Aunque no siendo el mismo caso, deslizamiento de alta montaña respecto al Volcán Yate y el de la undécima región un sismo provocado por la presión que ejerce el magna sobre la corteza terrestre, buscando salir a la superficie lo que puede dar origen a un cono volcánico o sismos que se vayan deteniendo o aumentando en forma impredecible, como lo vimos con este terremoto que deslizo el terreno ya blando por semanas de lluvia de ese lugar lo que provoco olas mortales, nos hablan de lo mucho que se debe hacer en el conocimiento de estos episodios sísmicos. En el fiordo de Aysén, donde se produjo el fenómeno telúrico, en los últimos 10 mil años han aparecido varios conos volcánicos sobre la falla Liquiñe-Ofqui, cerca de la zona de los sismos. Debemos recordar que por cada volcán en el continente hay 10 volcanes marinos.
Tenemos un grado tal de desconocimiento de los fenómenos telúricos en el Chile austral que se nos olvida que la región de Aysén el 21 de noviembre de 1927 tuvo un tsunami. En el Estrecho de Magallanes hubo un terremoto en 1878. El 17 de diciembre de 1949 el terremoto de Tierra del Fuego alcanzo una magnitud de 7, 5 grados en la escala de Richter.

Recordemos que nuestro país está ubicado en una de las regiones sísmicas más activas del mundo. Esto se explica por la posición geográfica de nuestro territorio, en una costa de subducción ( fosa chileno-peruana) donde convergen las placas tectónicas de Nazca y la Placa Americana. Durante el período que se extiende desde el fin del siglo XVI hasta el presente, a ocurrido un sismo de magnitud 8 en promedio cada 10 años.
La investigación sismológica en Chile partió en 1849 con motivo de la expedición astronómica de los Estados Unidos, que coloco el primer sismoscopio ( instrumento que indica que un terremoto esta ocurriendo, y la dirección general del mismo) que dio paso a la investigación científica, que se intensifico, después del terremoto de 1906 con la fundación del Servicio Sismológico Nacional por propuesta del rector de la Universidad de Chile, Valentín Letelier. Esta área de estudio aun tiene que dar muchos pasos adelantes como por ejemplo, la formación de una sólida red sismológica en todo país, detección de los lugares de riesgo y la creación de una cultura que nos prepare verdaderamente para enfrentar estos fenómenos de la naturaleza que moldean la fisonomía de la tierra y graba sus formas en los sueños de los habitantes del sur.