martes, diciembre 09, 2008

Entrevista a la escritora Marlene Bohle


Entrevista a la escritora Marlene Bohle que habla de su ultimo trabajo poetico " registro" y analiza su trayectoria literaria que la coloca como una figura relevante en la historia literaria de Puerto Montt.

Detrás del canto se escuchan voces: Una visión etnohistorica del relato de Alonso de Ercilla en el Seno de Reloncavi II parte


El caballero en tierras extrañas

El relato de Alonso de Ercilla esta impregnado de un espíritu caballeresco aquel que renacía con el ideario heroico del aventurero que buscaba honor y gloria para su soberano en las tierras lejanas de América. Un cruzado que venia a convertir almas, para sacarlo de la noche de la “idolatría” y ponerlo en la resto camino del tiempo de cristo esa imagen tutelada por la iglesia católica que combatía en Europa contra la “herejía” protestante. La épica de su canto se marca en una inquieta voluntad creativa de un renacentista que se adentra a lo desconocido en busca de la gloria.

Para Ercilla los huilliches como el anciano Tunconabal con el que se encontraron a la altura del actual pueblo de Casma eran también caballeros “Y aunque me veis en bruto trasformado/ a la silvestre vida reducido, / sabed que ya en un tiempo fui soldado, / y que también las armas he vestido...” le hace decir el vate.

Llegar al seno de Reloncavi era para Ercilla un signo de favor de su Dios después de estar tres días perdidos en un pantano y bosque espeso ( esto ubicado entre la zona entre Puerto Varas y Puerto Montt) por culpa de la arriesgada decisión del jefe de la expedición García Hurtado de Mendoza.

Los huilliches con que se encontraron eran gente que a la luz de esa mirada del siglo XVI eran iguales como se aprecia en el criterio de la descripción “ la buena traza y talle de la gente,/ blanca, dispuesta, en proporción fornida,/ de manto y floja túnica vestida”. Nuevos súbditos que solo le faltaba la supuesta luz de la civilización del reino de España.

Alonso de Ercilla queda claro en el canto XXXVI que sintió a los huilliches del

Seno de Reloncavi y las islas circundantes con gran agradecimiento por el socorro dado a su expedición coqueteando ya el poeta con la idea del buen salvaje “ La sincera bondad y la caricia/ de la sencilla gente de estas tierras/ daban bien a entender que la codicia/ aún no había penetrado aquellas sierras;/ ni la maldad, el robo, la injusticia/

( alimento ordinario de las guerras)/ entrada en esta parte habían hallado/ ni la ley natural inficionado”. Podría decir que el aventurero idealista que busca nuevos parajes para construir su paraíso en la tierra nace en este punto del sur del mundo, anunciando el cercano nacimiento de los sueños utópicos de otros pensadores que nos conducirían al despertar de la razón ilustrada.