Pasadas las 13: 30 horas como se aprecian en estas imágenes llegaron los restos mortales del director nacional Claudio Sapiaín a la sede de la Universidad de los Lagos en Puerto Montt ubicado en calle Serena, donde están siendo velados sus restos hasta el día de mañana.
Dentro de esta sede universitaria se vive una gran congoja entre el cuerpo docente y el alumnado desde temprano por la partida de este cineasta que fue profesor y coordinador de la carrera de Pedagogía en Artes con mención en Cine y TV, Teatro y Música.
A las 7 de la mañana Claudio Sapiaín, de 62 años, falleció en Puerto Varas debido a una compleja neumonía, que se agravó por enfermedades preexistentes que lo afectaban desde hace algún tiempo.
Para conocer al cineasta
Nacido el 5 de Febrero de 1948, en Santiago de Chile. En 1966, ingresa a la Universidad Técnica del Estado a estudiar Ingeniería Eléctrica, lo que interrumpe para iniciar estudios de cinematografía en la Escuela de Cine de la Universidad de Chile sede Valparaíso. Entre los años 1969-70 realiza estudios de cámara, montaje y dirección en el departamento de Cine Experimental de la Universidad de Chile de Santiago. En 1970 dirige su primer documental, Escuela Santa María de Iquique (1970), que le merece una mención en el festival de Oberhausen 1971.
En 1975 y encontrándose radicado en Suecia, escribe y dirige el documental La Canción No Muere, Generales, primero de una larga lista de producciones que realiza para el Canal 1 de la televisión sueca y, por el que recibe el Gran Premio del Festival de Moscú 1976.
En 1985 regresa a Chile, combinando el trabajo vinculado a la docencia, la realización de documentales y la producción de su primer largometraje de ficción, "El hombre que imaginaba" en 1998.
Su mirada fílmica se caracteriza por un viaje entre el realismo social duro con penetraciones visuales por el campo del ensueño y el delirio visual para indagar la naturaleza del hombre que deambula por la geografía chilena y latinoamericana.
Su mirada fílmica se caracteriza por un viaje entre el realismo social duro con penetraciones visuales por el campo del ensueño y el delirio visual para indagar la naturaleza del hombre que deambula por la geografía chilena y latinoamericana.