Lunes 26 de septiembre del 2016
Muy temprano en la mañana Salí del hotel a tomar el bus rumbo a Matamata
para ir a un tours hacia Hobbiton donde se había filmado la ya clásica película
El señor de los anillos.
Salimos de Auckland
caracterizado por su gran flujo vehicular matutino y algunos carteles que
anunciaban las elecciones locales caracterizadas por el tema de la congestión de tráfico y los
problemas del costo de la vivienda.
En la ruta se
apreciaba las zonas de cultivo, de explotación ganadera, muy semejante a la
región de los Lagos, dejando todo lo relacionado a lo técnico que marcada la
distancia con un país desarrollado, pasamos por un pueblo llamado Hamilton hasta
llegar cerca de mediodía al pueblo de Matamata.
Es te lugar con agradable locales para comer, tiendas bien abastecida para el turista y una librería muy completa con
una interesante sección de historia local que parte con la presencia maorí,
después a mediados del siglo XIX la llegada de misioneros, comerciantes y que
con la estación de trenes en 1885 se
asentaron un grupo de casas de esta población estimada en la actualidad en 7.500
habitantes.
Desde una década,
Matamata ha tenido un crecimiento en su turismo con el surgimiento de Hobbiton .
Todo parte en 1998 cuando el cineasta Peter Jackson buscando locaciones para su
película “ El señor de los Anillos” dio con una granja familiar a las afueras
de esta localidad que contaba con todas las características perfectas para
recrear el pueblo de los pequeños hobbits personajes del universo
literario de J. R.R.Tolkien.
En la oficina de turismo existe mucha información y souvenir
relacionados con esto y se encuentra una gran señal situada en la carretera de
acceso a la localidad en que se lee “ bienvenido a hobbiton”.
Después de esperar un rato subo al bus que lleva al tour
hacia hobbiton. Pasamos por muchas explotaciones agrícolas, especialmente
ovejas. La tierra se vuelve quebradiza, con mucho cerro, hasta llegar a la
entrada del lugar.
Un guía nos recibe y lo seguimos entrando por el único set
que sobrevive de las películas de Peter Jackson “El señor de los anillos” y “El
Hobbit”. En ingles el guía entrega todo los detalles del lugar, vinculándolo con
el libro y lo que fue la película, pasamos por las 44 cuevas de hobbit, un
puente de doble arco, el árbol de la fiesta, un molino hasta llegar al pub green
dragon en un largo recorrido que dura más de una hora que deja complemente
satisfecho al fanático de la saga. Es curioso como la insistencia de los
agricultores del sector pudo preservarse este sitio y sacársele provecho
mostrando las posibilidades que da el cine siempre como industria.
Es destacable el detallismo de cada construcción, el sentido
de arte del espacio, acá se buscaba recrear en cine lo expresado por Tolkien
que claramente si uno se pone a revisar su obra es una nostalgia por aquellos
paisajes campesinos preindustriales de la Inglaterra que comienza a ser
invadida por la revolución industrial y los fantasmas de la primera guerra
mundial que le toco vivir, quizá su libro es la lucha contra el miedo y la búsqueda
de la esencia natural y espiritual.
Dejamos este espacio en la tarde cuando las nubes cubren el
cielo para invitar a la noche ocupar su sitio en la vegetación que florece en
su círculo.