lunes, julio 16, 2007

La Huella de Monte Verde

En estos días en nuestra ciudad estamos presenciando una “simpática” campaña circense titulada “Deje su huella: un paso más para la construcción del Museo Arqueológico Monte Verde”. Primeramente es necesario hacer algunas aclaraciones al respecto y especialmente sobre la famosa huella que a su alrededor se ha construido toda una mitología.

Las investigaciones realizadas en el sitio Monte Verde determinaron en el componente ( MV-II) la presencia de una huella de pie humano en la arcilla al lado de un fogón grande que media 13 cm. de largo y la posible existencia de dos huellas más de 14 cm. y otra de 15,2 cm. Probablemente estas huellas representan a un individuo adulto pequeño o un adolescente.

En América hay marcas de huellas humanas pero mucho más modernas; entre las más destacadas están, las de Acahualinca, Nicaragua, que fueron dejadas por cazadores-recolectores a comienzos del Holoceno (unos 6.000 años antes del presente) en la orilla del lago de Managua.

Ahora queridísimos lectores ahí que pensar muy bien esta alucinógena idea del “Museo Arqueológico Monte Verde”. Actualmente los costos que implicarían la construcción del museo, promovida por la fundación Monte Verde son excesivamente altos en relación a la realidad nacional. Si analizamos con cuidado, no sabemos si las 700 piezas, que públicamente se han reconocido como recogidas de este sitio arqueológico llegaran al museo, donde están esta piezas actualmente, y quien tiene potestad de esta colección, hasta el momento no sabemos si esta fundación tiene algún poder o vinculo con estos objeto, que es bueno recordarlo es patrimonio de todos, es publica y de ninguna institución privada.

Otra duda que me surge es como se mantendrá este museo. La realidad como lo autoridades bien lo saben, es que la municipalidad no lo puede mantener. Ni tampoco con una cuantiosa entrada se sostendrá a esta institución. Esto lo podemos apreciar ya con el triste espectáculo del vagón de la costanera o sala Pablo Neruda y el Museo Juan Pablo II que carece de los especialistas en la conservación de las piezas de su colección.

El estado y los privados la verdad aún no demuestran un real compromiso con esta iniciativa que requiera más transparencia en todo el futuro proceso de ejecución.

Una de las falacias que me ha llamado la atención es que por el solo hecho de existir el museo vendrán los expertos a investigar el sitio Monte Verde. Esa actitud pueblerina es para reírse. Desde 1976 se ha sacado una cantidad enorme información este yacimiento arqueológico, que aun queda mucho por analizar y que la bibliografía más importante esta toda en ingles. Además es posible que existan sitios aún más antiguos en la zona, es de esperar que no tengan el triste final como por ejemplo el sitio de Puntilla Tenglo de una antigüedad superior a los 5.000 años que esta abandonado y a sido dañado de tal manera que se ha perdido una valiosa oportunidad de descubrir más de nuestro pasado.

Por eso cuando vean tanta fantasía, discursos alucinantes, recuerden siempre que existe un mundo maravilloso por descubrir más allá del carnaval del despilfarro y la locura.