Cada pulso de sonido me deja en suspensión, colgando de un ritmo que cruza la noche. Es pasaba las 23 horas, ya ha llegado mucha gente al bar 258 en el centro de Puerto Montt este jueves 30 de abril del 2015.
El dj Micka Dsc sonríe levemente por la llegada del numeroso público al patio del local. Da más intensidad a los ritmo nu disco para profundizar en intensidades y matices. La pista ya está dividida en tres partes, los expertos y más seguidores de la música electrónicas con sus atuendos de tonos más intensos se apoderan de un rincón del escenario, los de segunda fila que quieren bailar siguiendo la música y los de al final que quieren moverse un poquito y más conversar.
Las
conversaciones son cruzadas levemente por las anécdotas de los primeros días de
la erupción del volcán Calbuco. La imagen se apodera en mí, es como un hongo atómico,
poderoso, esa columna de sobre 4 kilómetros que lleno la vista a la altura de
población Cayenel pasada las 13 horas cuando se produjo el tercer pulso
eruptivo. La revelación de que la naturaleza dista sus tiempos nada más.
Neon
Pulse entra al entrar la madrugada con todo el toque más progresivo de la electrónica,
sin pausa me agarro en el ritmo, dejando pasar miradas, sombras, gente sin
importancia, sin nombre, murallas, grafitis, nada solo el sonido es el verbo
que se expande, mientras no busco nada, salvo seguir, continuar este viaje.Salgo afuera para caminar por la calle y entro en el barra bass para conversar, bailar un poco de indie rock en la tradicional fiesta rockrolla.
Después
vuelvo para envolverme con el house de la dj Kate Baldovino, ya no existe
espacio para bailar, sobre 300 personas se encuentran en la fiesta.
Al final camino por la costanera, buscando al volcán Calbuco que cubierto por las nubes negras allí sigue su rumbo, lanzando sus cenizas que harán florecer otros tiempos lejanos para el aliento que va dormir al amanecer.
Al final camino por la costanera, buscando al volcán Calbuco que cubierto por las nubes negras allí sigue su rumbo, lanzando sus cenizas que harán florecer otros tiempos lejanos para el aliento que va dormir al amanecer.
1 de
mayo del 2015