Es
jueves 27 de noviembre. A esa hora de la noche llovía con fuerza en el centro
de Puerto Montt. Dentro de Baco resto bar era una pequeña burbuja, los cliente conversaban
y disfrutaban escuchando la sección de música electrónica que desde pasada las
19: 30 horas se estaba desarrollando llamada “ future music”.
La Dj
kate Baldovino ponía con una enérgica
ejecución una dosis de indie trance que eran como pulsos que se dispersaban una tras otra, ordenadamente mientras seguida
en un rincón cada paso quedaba, siguiendo este instante significativo de la
primera mujer que desde hace tiempo se integraba a estos eventos musicales.
En
horas de la madrugada estuvo Dj Aveld Dracul con un toque más industrial y oscuro
en su debut en este tipo de encuentros, era cada ejecución como una especie de
acto de resistencia, de una manifestación de otro mundo aquel alejado de la
masa, mientras sus amigos ocupaban una mesa apoyándolo.
Más
temprano como estelar de la jornada estuvo la dj Lorena Sulz desde Santiago.
Con elementos de un puro electro hasta un trance bien abstracto, era una
entrega de un set sin puntos bajos, muy arriba, daban ganas de bailar con ese
remix de Depeche Mode, mientras revizaba los CD buscando el tema necesario, que
estaban todos bien ordenados, clasificados, marcados con una descripción justa,
con colores llamativos, como buena bióloga
que es su profesión. Se notaba que es una DJ que está en crecimiento en todas
sus posibilidades.
El
sonido de las gotas que golpeaban la calle Benavente se hacía intenso por esas
horas, las conversaciones con los conocidos giraban respecto a la noticia de
cierre de locales como cripta necroart bar y donde se desarrollarían
los próximos evento.
No
importa, como hoy quedo claro siempre habrá espacio para el sonido del paraíso.