9 de diciembre del 2020
Es curioso como después de tanto tiempo de iniciado la pandemia exista gente que siga sin colocarse la mascarilla. Hoy en la mañana me tocó ver a varios por la ruta en la caminata habitual por el sector alto de Puerto Montt. Lo llamativo no eran tanto joven sino adulto mayor. Es como una especie de rebeldía de demostrarse que nada ha cambiado. Muy mal eso, así uno tiene que huir al encontrarse con los porfiados, alejarse lo más posible de su demencial actitud.