Toledo el pasado espera
El 1 de octubre muy temprano llegamos a Toledo. Subimos por
una escalera mecánica rumbo al centro histórico de la ciudad. Pasamos por
empinadas y laberínticas calles donde nos encontrábamos de frente con el museo
los concilios y la cultura visigoda ubicada en lo que había sido una mezquita y
posteriormente iglesia.
Rápidamente la guía nos indico hacia la iglesia de Santo
Tomé de Toledo o de Santo Tomás Apóstol donde está el famoso cuadro El entierro
del señor de Orgaz de El Greco, un óleo realizado entre los años 1586 y 1588. Gran cantidad de
turistas llegan al sitio los que después de un par de minutos para verlos son
conminados a retirarse para dar el paso a más público ya que el espacio es muy
reducido en el interior.
Pasamos después por el barrio judío que recuerda la época medieval
hasta llegar a la sinagoga de la Santa María la Blanca, construida en el 1180 actualmente
funciona como museo. De estilo mudéjar, se siente en su arquitectura ese cruce
de influencias culturales cristianas, hebreas y musulmanes que se daba en
aquellos años.
Posteriormente llegamos al Monasterio de San Juan de los
Reyes, que fue construido bajo el impulso de la reina Isabel I de Castilla con
el deseo de convertirlo en mausoleo real.
De estilo gótico es una estampa de los días de auge de los reyes católicos con
ese juego entre grandiosidad y rigidez en el espíritu en busca de un más allá.
Los toledanos viven sus vidas, bien ajenos de los turistas, pregunto
a la guía sobre el alcazar de Toledo, donde se produjo un famoso asedio militar
en la guerra civil española en 1936, solo me indica que no queda por donde
vamos y es que en España de lo que me he dado cuenta no les gusta hablar mucho en
público sobre este episodio histórico, si hay libros, películas y documentales
pero escasean los museos sobre este tema llamativo en la historia mundial.
Quizás aún las heridas están abiertas, los temas que llevaron al conflicto sean
situaciones no resultas en esta nación.
Después tomamos fotos panorámicas con vista al rio Tajo. El
sol penetraba esa geografía donde la sequedad del suelo en superada por las
obras de aquellos que han pasado en distinto tiempo.
Encuentro en una tienda dos llaveros con los escudo de armas
de los Soto y los Alvarado para familiares ya que algo de acá dejo su huella en nuestro continente
americano.